Las piscinas y zonas verdes comunitarias son uno de los principales atractivos a la hora de decidirnos a comprar una vivienda. Sin embargo, la experiencia demuestra que también pueden ser una fuente de quebraderos de cabeza para los propietarios si no están bien protegidos.
Es una maravilla llegar a casa del trabajo y poder refrescarte en tu propia casa o la comodidad de poder disfrutarla en tu tiempo libre junto a tu familia o amigos. Y eso lo piensan todos tus vecinos. Incluso lo piensan los que no son tus vecinos.
Y aquí es dónde la piscina deja de hacernos tanta gracia porque al final somos responsables de todo lo que pueda pasar en la piscina y como propietarios tenemos que pagar los gastos que puedan derivarse de el mal uso o los accidentes, aunque “no bajemos nunca”
Efectivamente, si un vecino o un invitado de tu vecino tiene un accidente en la piscina puede denunciar a la comunidad para que ésta se haga cargo de los gastos o pedir una indemnización por los daños. Ya, esto no es Estados Unidos, pero es algo mucho más habitual de lo que crees.
O, como hemos dicho antes, la piscina es muy atractiva también para los que no son tus vecinos y tampoco es tan raro que en esas zonas se produzcan actos de vandalismo protagonizados por personas ajenas a la comunidad.
Y entonces deja de hacernos gracia la piscina.
Porque si hay un accidente en las zonas comunes y se demuestra que se ha producido por problemas en el mantenimiento o la falta de medidas de seguridad de las mismas, la comunidad debe pagar. O sea, los propietarios. A no ser que la comunidad tenga un seguro que lo cubra. Y aunque todos los seguros de comunidad incluyen la Responsabilidad Cvil hay que que tener en cuenta la suma asegurada, en la mayoría de los casos es escasa, por lo que la cuantía que sobrepase se aportará por los propietarios.
Y respecto a los destrozos en las zonas de piscinas… qué decir? Si parece un imán para los gamberros. ¿Verdad? Esto supone reparaciones, sobre todo estéticas, porque a nadie le gusta tener las zonas comunes echas un desastre. Oootra vez derrama.
En realidad no te estamos contando nada que no sepas ya, lo tenemos muy claro. Solo podemos recomendarte que revises las condiciones del seguro de tu comunidad y compruebes si cubren estas causas. Si lo hacen, enhorabuena: disfrutarás de tu piscina; aunque “no bajes nunca”.
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